El trabajo en el campo de la agricultura se ha optimizado en los últimos años. La inclusión de maquinaria especializada en el día a día en el terreno ha sido clave para agilizar algunas tareas, automatizar otras y, sobre todo, aliviar el esfuerzo de la mano de obra humana.
Y todo ello con la posibilidad, a la vez, de llevar a cabo un trabajo mucho más minucioso y respetuoso tanto con la propia tierra como con el medio ambiente.
Dentro de la agricultura de olivares, se ha popularizado el uso de una máquina para plantar olivos. Estos dispositivos son muy útiles en las primeras fases de un cultivo, así como cuando los agricultores quieren rejuvenecer su explotación con la plantación de olivos jóvenes.
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Estas máquinas alivian el trabajo, reducen la mano de obra necesaria, permiten hacer la tarea de una manera mucho más rápida y son tan cuidadosos con los árboles como utilizando el método tradicional. Por eso están ganando mucha popularidad y cada vez son más los responsables de este tipo de explotaciones que cuentan con ellas.
Maneras de realizar la plantación del olivo
Todo agricultor que trabaje la aceituna debe plantearse qué tipo de trabajo quiere llevar a cabo en su campo. Desde la plantación del olivo hasta su regadío y la recolección de los frutos, todo puede hacerse de distintos modos. Conocer la variedad de opciones hará que se pueda adaptar el trabajo diario a los deseos y necesidades de los responsables de la explotación agrícola.
Desde el punto de vista de la plantación del olivo, existen distintas maneras de llevar a cabo la colocación de los árboles. Además, hay que seguir unos criterios básicos para que el trabajo tenga efectos y los ejemplares crezcan fuertes y sanos.
El otoño es la fecha del año indicada para llevar a cabo la plantación del olivar. Una vez llegada esta época, toca preparar el suelo: subsolar y hacer un abono de fondo es imprescindible para que los árboles agarren perfectamente y puedan crecer sin problemas.
Posterior a esto toca marcar la zona donde se va a llevar a cabo la plantación. Esto es imprescindible porque hay que tener en cuenta la distancia para plantar olivos. Hay que recordar que se trata de árboles que pueden alcanzar edades centenarias y a crecer mucho en grosor y altura, de manera que deben tener espacio más que de sobra para ello.
Con las zonas marcadas, se lleva a cabo un agujero en la tierra. Aquí entran en juego las máquinas para plantar olivos: un ahoyador será ideal para hacer el hueco necesario para las raíces de los árboles.
En la última fase del proceso, se planta el árbol, se fija una guía y protección para que aguante en su etapa más tierna y se tapa y riega. Con los cuidados adecuados, el olivo irá creciendo poco a poco hasta convertirse en un frutal adecuado para explotar desde el punto de vista de la recolección.
Esta es la forma más artesanal y clásica para plantar olivos, pero hoy en día además existen máquinas plantadoras de olivos que realizan este trabajo de una manera automática y sin apenas esfuerzo por parte de los trabajadores del campo. Estas máquinas se han convertido en imprescindibles en las explotaciones profesionales, y cada vez más en los cultivos pequeños.
Por qué es necesaria una máquina para plantar olivos
La maquinaria del campo ha experimentado una interesante evolución en los últimos años. Gracias a ello, se han podido optimizar y facilitar procesos. Un caso es el del cultivo del olivo, que hoy en día puede realizarse de una manera mucho más cómoda y rápida con máquinas sembradoras.
Estas herramientas tratan de que todo el proceso de plantado sea automático. Cuentan con perforadoras que realizan el agujero necesario en el suelo para dar espacio al olivo. Están capacitadas para llegar al nivel de profundidad correcto y hacerlo, además, sin dañar ni remover el suelo más de lo necesario.
Todo ello tiene como resultado unas muy interesantes consecuencias positivas para el cultivo: la parcela queda mucho más cuidada, el crecimiento se mejora y se agiliza y, por supuesto, se evita la pérdida de ejemplares por un mal trabajo humano en la siembra.
Además, estas máquinas son necesarias en los casos en los que las explotaciones agrícolas no pueden contar con un gran número de trabajadores: de forma automática y casi sin intervención humana se puede hacer el trabajo con un par de personas.
Características del terreno para plantar olivo
El suelo ideal para el cultivo del olivo responde a un amplio catálogo. Este tipo de árboles se adaptan muy bien a distintas circunstancias y escenarios. Sin embargo, hay que destacar que los olivos crecen mejor en suelos permeables y de texturas gruesas, que facilitan el drenaje y la infiltración.
Gracias a ello, y tras contar con una máquina para plantar olivos, se puede gozar de una excelente explotación de olivares para uso doméstico o profesional. Todos estos avances no son más que una forma de trabajar más y mejor el campo y lograr rendimientos de recolección de más alta calidad.
