La sombra de la sequía, cada vez más presente en nuestro planeta, se cierne sobre el sector agroalimentario como una amenaza constante. En el caso de la olivicultura, este problema se vuelve especialmente crítico, ya que el olivo, si bien es un árbol de gran rusticidad, se ve seriamente afectado por la falta de agua. Las consecuencias de la sequía en los olivares son devastadoras: reducción de la producción con cosechas menos abundantes y de menor calidad, deterioro del estado de los árboles y mayor susceptibilidad a plagas y enfermedades, aumento de los costes de producción e impacto ambiental que tiene como consecuencias últimas la desertificación, erosión del suelo y pérdida de biodiversidad.
Ante este panorama, la eficiencia en el riego se convierte en una cuestión fundamental para la supervivencia y la rentabilidad de los olivares. En BALAM Agriculture somos conscientes de esta realidad, por ello, apostamos por una gestión integral del agua que abarca desde la caracterización de suelos hasta la implementación de sistemas de riego tecnológicamente avanzados. De todo ello que encarga el departamento especializado de BALAM Aqua.
La caracterización de suelos es el punto de partida para un riego eficiente. Esta técnica nos permite determinar la textura, la estructura, la composición química y la capacidad de retención de agua del suelo, información vital para diseñar un sistema de riego a la medida de las necesidades de cada parcela.
En BALAM Agriculture, sin embargo, entendemos que la caracterización de suelos no se puede limitar a un simple análisis físico-químico. Por ello, nuestro equipo de expertos realiza un estudio exhaustivo que incluye:
- Análisis de la conductividad eléctrica del suelo mediante georadar, una técnica que nos permite obtener información precisa sobre la textura del suelo a diferentes profundidades en toda la parcela.
- Mapeo de la profundidad del suelo para determinar la profundidad del suelo disponible para el desarrollo de las raíces del olivo.
- Evaluación de la fertilidad del suelo para analizar los niveles de nutrientes disponibles para las plantas.
- Análisis de la materia orgánica para determinar la cantidad de materia orgánica presente en el suelo, un indicador clave de su salud y fertilidad.
- Estudio de la topografía del terreno para determinar la pendiente del terreno y optimizar el diseño del sistema de riego.
En base a la información obtenida en la caracterización de suelos, realizamos el diseño del riego según el marco de plantación y orientación más idónea, eligiendo el gotero que mejor se adapte a las necesidades de cada parcela.
La elección del sistema de riego por goteo, en particular, representa un avance significativo en la olivicultura moderna. Este sistema permite no solo un ahorro considerable de agua, sino también la posibilidad de integrar la fertirrigación, una técnica que consiste en la aplicación de fertilizantes solubles a través del sistema de riego. Esta práctica optimiza la nutrición del olivo, mejora la eficiencia en el uso de los nutrientes y reduce el riesgo de contaminación de las aguas subterráneas.
Además, integramos sensores y controladores de última generación que permiten monitorizar en tiempo real la humedad del suelo y el estado de los cultivos, automatizar el riego, asegurando una aplicación precisa del agua en el momento y en la cantidad justa, y optimizar el uso del agua y minimizar las pérdidas por evaporación.
La implementación de un sistema de riego eficiente basado en la caracterización de suelos ofrece una serie de beneficios tangibles para los olivareros:
- Ahorro de agua, lo que se traduce en un importante ahorro económico y una menor huella hídrica. En un contexto de sequía, esto es crucial para la supervivencia de los olivares.
- Mejora de la producción, ya que el riego eficiente asegura que los olivos reciban la cantidad de agua que necesitan para un desarrollo óptimo, lo que se traduce en un aumento de la producción y de la calidad de las aceitunas.
- Mayor rentabilidad, ya que la eficiencia en el riego se traduce en un aumento de la rentabilidad de las explotaciones olivareras.
- Sostenibilidad medioambiental, ya que se protege el medio ambiente al evitar el uso excesivo de agua y la contaminación de los suelos.
Más allá de las ventajas económicas y ambientales, la
eficiencia en el riego también tiene un impacto social positivo. Permite a los
agricultores asegurar la supervivencia de sus olivares y mejorar su calidad de
vida. En un contexto de cambio climático y escasez de recursos, la eficiencia
en el riego es una herramienta fundamental para garantizar la viabilidad del
sector olivarero y el futuro de las próximas generaciones de agricultores.
Es por ello que, desde nuestro compromiso con los
agricultores y con la sostenibilidad, y gracias a la amplia experiencia de los
profesionales que conforman los diferentes departamentos estratégicos de BALAM
Agriculture, seguimos trabajando cada día con el objetivo de ofrecer soluciones
innovadoras que permitan a los olivareros optimizar el uso del agua, aumentar
la rentabilidad de sus explotaciones y contribuir a la protección del medio
ambiente.