El riego del almendro es uno de los aspectos más importantes para lograr una buena producción del fruto de este árbol.
Lo esencial que debemos conseguir es la humedad adecuada que necesitan estas plantas durante su crecimiento, pero sin llegar al exceso de agua, ya que se pudrirían las raíces.
Mientras mayor cantidad de agua se le suministre a la planta, la cantidad de frutos aumentará significativamente, sin embargo, al alcanzar el límite máximo volumen de líquido tolerado, ya no habrá un aumento de cosecha, por lo que se necesita una dosis riego del almendro exacta.
La gestión del riego de almendros
Para un máximo crecimiento, rendimiento, calidad de los cultivos y la vida útil de la huerta, se deben satisfacer sus necesidades de agua completa.
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Un buen riego almendro joven ayudará al desarrollo de la hoja, del brote y el desarrollo de cogollos terminales y laterales.
La falta de dotación de riego del almendro durante su crecimiento afectará a la producción de frutos para los años siguientes, por lo que, en esa primera etapa, no se debe centrar el objetivo en la obtención de una buena cosecha, sino en el fortalecimiento de un sistema radicular potente, de gran volumen.
Desde el otoño y durante el invierno los requerimientos de riego de apoyo del almendro serán bastante bajos, lo que significará un ahorro potencial de agua, que será necesaria emplear durante la primavera y muy especialmente en verano.
La estrategia de riego del almendro comenzará cuando comienza el crecimiento del brote y aparecen las hojas a desarrollarse.
Al igual que el dosel arbóreo, la temperatura climática aumentará, por lo que la planta requerirá mayor humedad del suelo.
Tipos de sistemas de riego para almendros
Para el riego de almendros se suelen utilizar dos tipos de sistemas de irrigación:
1.- Sistema de riego por microaspersión: Este sistema consiste en realizar el regadío de almendros mediante la aplicación hídrica en forma de lluvia, haciendo uso de microaspersores que se encargan de suministrar el agua en gotas muy finas.
El caudal de presión de la microaspersión es muy bajo, así como el área que humedece es reducida, pero uniforme, por lo que será óptimo para cubrir las necesidades de riego del almendro. La aplicación del agua va directamente a las raíces.
2.- Sistema de riego por goteo: También conocido como sistema de irrigación gota a gota, permite optimizar el uso del agua.
El riego por goteo almendro se dirige directamente a las raíces de la planta, mediante la utilización de tuberías y goteros que dosifican el líquido.
Aunque los goteros liberan una mínima cantidad de agua, esta es suficiente para el buen crecimiento de las plantas.
Se pone un solo gotero justo donde se encuentra ubicada la mata, por lo que estarán lo suficientemente separados unos de otros, ofreciendo el riego necesario del almendro.
El riego de almendros por goteo es el sistema más utilizado, ya que es la forma más eficiente de regar este tipo de cultivos.
Como ya hemos señalado, el agua es indispensable para el buen desarrollo de esta planta y este tipo de irrigación destaca sobre los demás.
La eficiencia de aplicación de agua y fertilizantes se ubica entre el 90 y el 95%, mientras que, con otros sistemas de riego para almendros, se logra solo un máximo del 60%. Aumenta la frecuencia de la irrigación, pero el bajo caudal mantiene un nivel óptimo de humedad.
Para su instalación y posterior utilización se requiere poca mano de obra, lo que minimiza los costos por riego y abonado del almendro, así como el deshierbe, ya que el regado se evita donde no hay plantas, lo que disminuye el crecimiento de maleza.
